Nihat Kahveci quiere tumbarse a España

"Pienso que ganar a España no es un sueño". Nihat Kahveci, jugador de Turquía está convencido de sus posibilidades. La actitud del delantero del Villarreal es común en el combinado que dirige Fatih Terim, como quedó patente en una rueda de prensa. Ante la pregunta de un periodista turco sobre si ganar a España es "un sueño para Turquía", Nihat Kahveci respondió rotundo: "Yo tengo muchos sueños y siempre los olvido al despertarme. Pero ganar a España no es un sueño".

"Y es que hemos llegado a un punto, como selección nacional de Turquía, en que ganar a cualquier equipo ya no es fantasía", añadió el futbolista del Galatasaray Arda Turan. Por su parte, Terim avisó de que, contra España, Turquía tendrá una alineación muy poderosa: "80 millones de personas que nos apoyarán". "Jugaremos en el campo y en la grada", añadió, aunque pidió que los seguidores turcos, y también los jugadores, tengan paciencia y no se precipiten.

"Creo que nuestros éxitos y nuestros fracasos se exageran. Si marco un gol soy un héroe nacional; si no lo marco, un traidor a la patria", se quejó el experimentado Nihat. Además, el técnico turco hizo un llamamiento al 'fair-play' ya que, según dijo, los españoles trataron a la selección turca muy bien en Madrid y ellos tratarán de devolver este buen trato. "El ambiente será impresionante, pero no un infierno en el mal sentido de la palabra, sino en el bueno", dijo Nihat.

"No hay que olvidar que jugamos contra la mejor selección del mundo, pero la selección turca ha sido capaz de jugar con su propio estilo, que es siempre ir a ganar", añadió el delantero del Villarreal.

Sobre el equipo español, el 'Imparator' Terim dijo que su punto fuerte es "la confianza" que tiene en sí mismo tras haber concluido 30 encuentros sin conocer la derrota. Aún así, el seleccionador turco ve factible el triunfo turco en el coloso Ali Sami Yen y dijo tener "fe" en que Turquía logrará clasificarse para Sudáfrica 2010.

España lista para vencer por segunda vez a una decidida Turquía

Los campeones de Europa juegan mañana en el coloso Ali Sami Yen de Estambul el segundo de los dos enfrentamientos ante Turquía, en el que el España busca sumar un nuevo triunfo con el que dejaría prácticamente sellada su clasificación para el Mundial de Sudáfrica 2010, enterrando viejos fantasmas en forma de repescas.

Después de la victoria (1-0) ante los otomanos del pasado sábado en el Santiago Bernabéu, el combinado nacional, que cuenta sus encuentros en el grupo de clasificación por triunfos (cinco de cinco), distancia ya en seis puntos a Bosnia y en siete a Turquía, por lo que un buen resultado a orillas del Bósforo permitiría a los de Del Bosque comenzar a reservar su billete para la cita mundialista, pudiendo poner ya la mirada en el reto de la Copa Confederaciones del próximo mes de junio.

Y es que lejos del juego brillante de anteriores encuentros, lo cierto es que, como ocurrió el pasado sábado, España ya gana por inercia. Y es que la 'roja', que sigue incorporando poco a poco a su ADN un gen ganador tan añorado a lo largo de su historia, suma 30 encuentros invicto.

27 triunfos y tres empates, ocho triunfos en los ocho encuentros de 'la era Del Bosque' para un total de diez victorias consecutivas, con sólo un gol en contra y 19 a favor, son los inmaculados números de un equipo que, de sumar una nuevo encuentro sin perder, igualaría la mejor racha de imbatibilidad del combinado nacional a lo largo de toda su historia, conseguida en tiempos de Javier Clemente (1994-1998).

Para ello, la campeona de Europa tendrá que al menos puntuar en un 'infierno' turco del que nunca ha salido victoriosa y donde ni siquiera ha sido capaz de marcar un gol. Tres empates sin goles y una derrota por la mínima (1-0) son los precedentes de las visitas de España a Estambul, que siempre ha sido el escenario de estos enfrentamientos.

Para este encuentro de vuelta, el seleccionador nacional, Vicente Del Bosque, que visitará un coloso, el del Galatasaray, en el que vivió grandes duelos como entrenador del Fenerbahce, prepara algunos cambios respecto al once que jugó el pasado sábado.

Como remedio al atasco en la zona ancha, el técnico salmantino apostará por abrir las bandas, y en ese mayor protagonismo del juego por fuera, Silva y Riera, ambos suplentes en el Bernabéu, podrían tener su oportunidad, con Xabi Alonso y Senna, manteniéndose en su función de anclas del equipo.

De confirmarse este centro del campo, Del Bosque podría dar descanso a Villa, dejando la función de enganche con la punta de ataque, en la que repetirá Fernando Torres, a Xavi. Además, Casillas en la portería, y Sergio Ramos y Capdevila en los laterales, completarían un once en el que a Albiol podría dejar su sitio a Marchena como pareja de Piqué, autor del tanto de la ida, en el centro de la zaga.

Es importante mencionar que el rival es un cuadro turco con ganas de revancha y con la necesidad imperiosa de sumar los tres puntos para no descolgarse peligrosamente. Con la prensa local 'calentando' el encuentro y con su incondicional afición como aliento, Turquía, semifinalista en la pasada Eurocopa, tratará de convertir en una olla a presión el Ali Sami Yen para lograr un resultado que no ponga en serio peligro su presencia en el Mundial.

Como se dijo antes, el arbitraje de Massimo Busacca y el hecho de que en el Bernabéu se silbara el himno otomano, algo sagrado para ellos, no ha sentado nada bien en el país, que clama venganza y que prepara un clima hostil para recibir a la 'roja'.

El seleccionador turco, Fatih Terim, podría repetir la alineación del sábado, dado que necesita un once ofensivo, y el que presentó en Madrid lo fue. Así, para contrarrestar el balompié de toque de España, Turquía volverá a poblar la medular, donde basa su empuje y su poder, con el bético Memeth Aurelio, el veterano Emre Belozoglu, Turan y Tuncay, un todocampo que llega bien a la portería contraria.

Arriba, Terim podría repetir con la pareja Nihat-Semih Senturk, mientras que los problemas en el corazón de la defensa, donde son baja los habituales Servet y Zan, volverían a ser resueltos con Emre Asik y Uzulmez, dejando para Gonul y Balta los laterales.